En el sector marketing se habla mucho de estrategias de venta, pero… ¿Sabías que la forma más antigua y poderosa de hacer marketing se remonta a tiempos ancestrales?
El ser humano siempre ha tenido un afán de mejora innato, queriendo cambiar lo que considera obsoleto. Cuando lo ha transmitido socialmente, se han generado movimientos y, estos, a su vez, son los que han generado el efecto contagio que ha movilizado masas en una dirección.
Sí, los Movimientos son la forma de marketing más antigua que ha existido, desde hace siglos, uniendo a grupos de personas, de mayor o menor tamaño, por una causa común para promover un cambio social, cultural, político o laboral, entre otros.
Y, aquí viene lo más interesante: es la clave que permite generar grandes comunidades en redes sociales entorno a una marca. En otras palabras, es la puerta a generar una gran visibilidad porque atraerás a todas aquellas personas que se identifican con tu movimiento.
Los Movimientos impactan por su pasión y autenticidad, justo lo que más escasea a día de hoy. Tu audiencia, tu cliente ideal, se unirá a tu movimiento porque se identifica con él, al creer en la causa que promueve y, aquí viene la magia: cuando tu producto o servicio resuelve el problema que tu movimiento quiere cambiar, venderás sin esfuerzo, por conexión. ¿Por qué? Porque tu cliente quiere sentir que está ayudando a cambiar esa situación. Es la magia de un Movimiento, generar una conexión emocional profunda con tu público porque, en el mundo actual, donde la autenticidad escasea, los movimientos son ese soplo de aire fresco que ayuda a las masas a caminar hacia un bien mayor.
Porque los movimientos no van de ti, ni de tu oferta, ni de tu producto o servicio… No. Los movimientos van de tu tribu, de la gente a la que puedes ayudar. Tú solamente eres la brújula que señala la dirección hacia la que dirigirse. Por eso crean comunidades tan fuertes y tan extraordinariamente comprometidas. La tribu comparte comparte una visión y trabaja unida para lograr su objetivo común, lo que se traduce en sentimiento de pertenencia. Cohesión, lealtad y compromiso a largo plazo.
Los Movimientos causan viralidad constante y sostenida en el tiempo porque fomentan la participación activa de sus miembros y su compromiso con la causa. Por eso, ese bien mayor, ese objetivo común, se difunde tan rápido redes sociales. ¿Resultado? Un alcance y un impacto masivo y una exposición orgánica creciente, sostenible en el tiempo e imparable para la causa común.
El cambio que promueven los Movimientos, siempre, se basa en un bien mayor a los productos o servicios, de ahí que se genere un alto impacto en las personas. Genera un anclaje muy profundo en la mente, y transmite una sensación de estar haciendo un gran bien por y para la sociedad. Lo que, a su vez, les lleva a ser transmisores de altas expectativas de cumplir sus objetivos. Lo que a su vez también es anclaje de expectativas y excelencia de los productos o servicios relacionados con tu marca.
Es imposible que, si conectas con un Movimiento, no tomes acción. Es literalmente imposible. ¿Por qué? Porque arraiga en un nivel muy profundo de tu subconsciente, conduciéndote hacia un escenario que sabes a ciencia cierta que te va a ayudar a ti y a los demás. Esta es la razón por la que los Movimientos tienen una capacidad tremenda de generar acción masiva social y presionar por un cambio real. Lo que, inevitable e inexorablemente, se traduce en un efecto duradero y estable en la sociedad, disparando la reputación, la autoridad y la visibilidad de la marca que lo lidera.
¿Qué está pasando en la sociedad que esté perjudicando al colectivo social al que tú puedes ayudar? Ese es el enemigo común que tenéis en la sociedad y al que has de hacer frente para solucionar el problema. Cuando hables de tu movimiento estarás elevando la conciencia social acerca de lo que está ocurriendo y, como consecuencia, tu audiencia se verá identificada con ese problema, despertando una necesidad ferviente de cambiar la situación, su situación, comprando tu producto o servicio, y sumándose a tu movimiento. Así generas un profundo anclaje de conciencia social e impulsas la toma de acción de tu potencial cliente sin caer en las clásicas técnicas agresivas y directas de los embudos de venta.
¿Has identificado ya cuál es ese gran problema que te está perjudicando tanto a ti como a tu tribu? ¡Genial! Ya tienes definida la causa común que vas a defender como líder. Al hacerlo, estarás alineando, de manera natural, tus valores de marca con los de tu audiencia. Porque los valores, la verdad que te mueve, se revela a través de tu conducta. Porque la conducta nunca miente. Trabajando desde aquí, ya estarás siendo disruptivo y auténtico porque muy muy pocos en el mundo se atreven a liderar un movimiento.
Una vez comiences a liderar tu movimiento, comprometiéndote con tu causa, atraerás a personas con el mismo nivel de compromiso. De ahí que, cuando tu movimiento se alinea con tu producto o servicio, resolviendo el problema sobre el que estás elevando conciencia, se disparen los gatillos mentales de compra de una manera absolutamente natural y espontánea, sin siquiera forzar. Por eso tu comunidad, tu tribu, compartirá contigo tu misma visión y objetivos. Ahora, de lo que se trata, es de accionar creando eventos, membresías, grupos de WhatsApp p Telegram donde fomentes la participación activa para consolidar los lazos que te unen con tu tribu.
Una vez lo tengas todo definido, es obvio que tienes que empezar a utilizar todos los canales posibles para empezar a transmitir en redes sociales tu movimiento, por coherencia, porque no va de ti. Todo lo que haces al trabajar con tu movimiento va de tu tribu. Luego, complementa con un blog, email marketing y otros canales para compartir historias y generar ese alto impacto natural que causan los movimientos. Conforme vayas creciendo, muestra tus testimonios y casos de éxito y transmite todos los progresos y resultados que conquistes con tu Movimiento.
Por todo lo expuesto, cuando trabajas y vendes tu movimiento, causas un impacto que va mucho, pero mucho más allá de la venta de tus productos o servicios. Al elevar la conciencia de social, estás prestando un servicio y un bien mayor que cambia vidas en mayor o menor medida de acuerdo a la profundidad del cambio de tu movimiento. A mayor dimensión tenga el cambio que quieres hacer, mayor impacto y mayor calado causarás, dejando un legado importante cuando ya no estés… Porque es justo de eso de lo que va tu movimiento.
Per sé, el propio movimiento va a inspirar a tu audiencia a tomar acción… Pero no por eso debes dejar de hacer llamadas a la acción a tus productos o servicios porque, como decía antes, tienes la obligación moral de vender aquello que sabes que ayuda de verdad a mejorar la vida de las personas que tienen el problema que, justamente, tu movimiento soluciona. Ten tu embudo de venta y haz lanzamientos periódicos para generar picos de caja que se traduzcan en tranquilidad para seguir promoviendo el cambio a través de tu movimiento. De esta forma tus ventas serán, tan sólo, una consecuencia natural del servicio prestado a la sociedad a través de tu marca.
En suma, los movimientos son la forma más poderosa, natural y auténtica de hacer marketing porque, cuando lideras una causa, haces que quienes se identifiquen con el problema que tú estás señalando, quieran sumarse a tu movimiento y, antes o después, comprar tu producto o servicio. Atraerás a clientes tremendamente comprometidos con ese cambio, su cambio personal o profesional, y podrás vender por tickets más altos para generar rentabilidad porque estás sirviendo a un bien mayor.
Porque, recuerda, un movimiento no va de ti. Va del servicio que prestas a tu tribu, del bien mayor que causas a todos aquellos que se suman a él y, en consecuencia, de la transformación que generas en tus potenciales clientes. Por eso liderar movimientos es la forma más antigua de marketing que existe y, al mismo tiempo, también la más efectiva.
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